En la actualidad, echar un polvo es un modismo figurado y coloquial que equivale a hacer el amor.
Antiguamente se asociaba al hecho de ir a consumir rapé, o sea, polvo de tabaco. Hubo un tiempo en que el consumo de rapé, conocido también como polvo de Sevilla, se puso de moda entre los caballeros y nobles. Estos, en las reuniones sociales, se retiraban a una habitación especial a echar un polvo, es decir, a fumar.
Parece ser que en estos cuartos especiales y algo retirados de miradas intimidatorias las cosas se ponían caldeadas *guiño, guiño*.
No hay comentarios:
Publicar un comentario