Se dice que alguien se rasga las vestiduras cuando se muestra muy indignado ante algo.
Esta expresión procede de hace mucho tiempo, de la antigua Sumeria, concretamente. Por entonces era común el rasgarse la ropa como acto sincero de dolor ante la muerte de un ser querido.
En la Biblia se recoge esta expresión cuando el sumo sacerdote Caifás se rasga las vestiduras al escuchar decir a Jesucristo que es el Hijo de Dios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario