Se conoce como sugar daddy a aquel hombre mayor que tiene una relación sexual a cambio de una mantención económica (regalos o dinero en sí) con una mujer mucho más joven. Si esta situación sucede con una mujer mayor con un hombre joven, se conoce como sugar mommy.
Esta expresión tiene su origen en 1908, en ese entonces, Adolph B. Spreckles heredó una empresa azucarera cuando falleció su padre, conocida como Spreckles Sugar Company. Además de este negocio, el tipo tuvo otros cargos en la Western Sugar Company, la Oceanic Steamship Company, la Sunset Monarch Company y fue presidente de la San Francisco and San Mateo Electric Railway.
Vamos, que el tipo estaba forrado y tenía gran reconocimiento social, tanto es así que un lago del Golden Gate de San Francisco tiene su apellido, el Lago Spreckles.
En su vida se cruzó la modelo Alma de Bretteville, una mujer sin dinero pero de gran belleza, siendo muy conocida en la ciudad de San Francisco.
La cosa es que se conocieron, se enamoraron y se casaron, siendo una de las parejas más envidiadas de California. Además, un hecho destacable entre ellos dos era la notable diferencia de edad que tenían, de 24 años. Tanta diferencia hacía que pareciera que él más que su marido, era realmente su padre, a quien ella le llamaba cariñosamente sugar daddy.
Y de aquí viene esta expresión.
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